domingo, 18 de octubre de 2009

¿Protegiendo nuestro patrimonio?

Las imágenes que se muestran a continuación corresponden a la zona noreste de la subida hacia el Morro Solar tomadas el 18 de noviembre del 2009. Hace más de una semana se realizaron obras de ampliación de la vía, al parecer sin previa autorización a la entidad pertinente (entiéndase INC), sabiendo que toda esa zona es intangible.
Como se sabe, en esa zona existen restos arqueológicos de la cultura “Ichma” (Lima) y vestigios, humanos y materiales, de la batalla del 13 de enero de 1881.
Toneladas de tierra fueron removidas y en estas se descubrieron cantidad de restos humanos del siglo XIX y pre incas, telas, sogas y otros elementos de nuestro patrimonio. Todo esto fue llevado como desmonte a La Chira, quedando desde hace más de una semana una larga pared con distintos estratos donde se aprecia a simple vista cantidad de vestigios arqueológicos bajo desmonte de basura.
El miércoles 14 de octubre, hice el llamado correspondiente a las autoridades del INC a través de su página web, sección “Contáctenos”, y a la fecha nadie se ha hecho presente en el lugar.
Pareciera también que la Municipalidad de Chorrillos desconociera la gran importancia histórica del lugar o no le interesara para nada su pasado. En vez de capitalizar y rescatar estos restos para un museo de sitio, está más interesado en que más gente invada el perímetro del complejo “Morro Solar”.
Nadie discute el rescate y puesta en valor de muchas zonas de Chorrillos como el malecón, La Av. Huaylas o el paseo de la Costa Verde pero en cuestión de patrimonio histórico las autoridades dejan mucho que desear habiendo permitido, a pesar de las reiteradas denuncias, el avisado robo sistemático de las placas de los monumentos a Miguel Iglesias y del Soldado Peruano.
Hago un llamado a los arqueólogos, historiadores y entendidos en el tema para que puedan tomar cartas en el asunto y de una vez por todas, aunque en un contexto ya disturbado, realizar un estudio completo de estos vestigios antes que perdamos otra oportunidad de conocer más sobre nuestro pasado histórico.

Juan Carlos Flórez Granda.




domingo, 24 de mayo de 2009

Datos para la historia sobre las fortificaciones de Arica y su eficacia en los combates de febrero y marzo de 1880. Documentos del Archivo Panizo.

Juan Carlos Flórez Granda.(*)

Introducción.-

El 08 de agosto de 1868 Arica había sufrido años los efectos devastadores de un terremoto y posterior tsunami que había dejado la ciudad y puerto destruidos. No existía desde esa época fortificación alguna que protegiera esta importante plaza.

La declaración de guerra por parte de Chile el 5 de abril de 1879 sorprendió al Perú sin armas ni elementos suficientes para una adecuada defensa. Hablar de ello sería repetir lo que otros trabajos e historiadores han demostrado a través de todos estos años.

El presente trabajo tiene por finalidad mostrar un aspecto poco conocido sobre los inicios de las fortificaciones, publicando a su vez documentos del Archivo Panizo, los cuales conservo a través de la institución que dirijo y que en su conjunto podrán dar detalles de todo el proceso de fortificación hasta probar su efectividad en los dos únicos combates de costa, resaltando el gran aporte de las baterías del Norte comandadas por el Coronel Don Arnaldo Panizo durante el desbloqueo del puerto de Arica por la corbeta “Unión”. En todos los partes y transcripciones se ha respetado la puntación y errores ortográficos tal como aparecen en los manuscritos originales.

Inicios de los trabajos de fortificación.-

Al inicio de la guerra el contralmirante Lizardo Montero fue nombrado Jefe Político y Militar de los Departamentos del Sur. El 9 de abril asume el mando de la comandancia general de las baterías y fuerzas de Arica, trasladándose a esta provincia inmediatamente a continuar los trabajos de fortificación,[1] iniciados por el Prefecto de Tacna, Dr. Carlos Zapata y encomendados desde el 2 de abril de 1879, por Mariano Ignacio Prado, al coronel Arnaldo Panizo en el cargo de jefe de las fortificaciones.
Bajo su jefatura, Panizo trabajó conjuntamente con los ingenieros Teobaldo Eléspuru y Castillo, construyendo y artillando las Baterías del Norte: “San José”, “Santa Rosa” y “Dos de Mayo”, y las del Este uniéndose por una línea de fortificaciones pasajeras, cubriendo la retaguardia del Puerto y el Norte de las Baterías de “San José”[2].

Inspección de las baterías.-

El 13 de noviembre de 1879, una comisión compuesta por el los tenientes coroneles José Godines, Benigno Ostolaza y el sargento mayor José Lino Coello, tuvo por misión supervisar el estado de avance de las baterías del Norte, emitiendo un parte el cual adjuntamos el siguiente documento:

Comisión inspectora de la Baterías[3]
Y Fuerza de esta Plaza
Arica, Noviembre 13 de 1879

Bmto. Sor. Corl. J. de E. Mayor de las Baterías
Y Fuerza de esta Plaza.
S.C.

En cumplimiento de lo ordenado por U.S. para inspeccionar las baterías de esta plaza, en unión de los Sres. Jefes Coronel D. Beningno Ostolaza y Sarjento Mayor D. José Lino Coello, tengo el honor de dar cuenta a U.S. de la inspección que se practicado en las del Norte, mandadas por el Sr. Corl. D. Arnaldo Panizo, permitiéndome desde luego manifestar a U.S. la satisfacción que ha tenido la comisión al encontrar las citadas baterías en (…roto…) estado de adelanto, que no es fácil comprender que en el poco tiempo de su establecimiento se hayan emprendido trabajos de tanta importancia y significación que solo el patriotismo y constancia así como la inteligencia de su Primer Jefe y disciplina de sus subordinados, pueden haber dado cima á una obra que está llamada a dar un día de gloria al Perú.

Por el estado general que acompaño, verá U.S. que en este puerto se han construido tres Baterías. La primera denominada “Santa Rosa” con un cañón de 300 sistema Babasseur; la segunda “2 de Mayo” con un cañón del mismo sistema, y la tercera “San José” con dos cañones de 120 sistema Parrot. Estas baterías se encuentran con sus cañones bien montados; sus plataformas y polvorines de una construcción sólida y con arreglo á la perfección del arte. Así mismo hay en cada batería habitaciones para Jefes y Oficiales y cuadras cómodas y bien ventiladas para la tropa.

Inspeccionados prolijamente los proyectiles, pólvora, saquetes y su material en general, se encuentra todo completo y en perfecta seguridad y conservación.
El personal de los S.S. Jefes y Oficiales es cumplido; y a primera vista se comprende que cada uno en su puesto desempeña perfectamente las obligaciones de su cargo. Los individuos de tropa de que se compone la Brigada es de 110 hombres, divididos en 3 compañías, que sirven de dotación para cada Batería. Esta fuerza es demasiado reducida, y es de necesidad que se aumente al número de 200 hombres con la que se formarán cuatro compañías para el buen servicio de las tres Baterías, y haya como reemplazar las bajas que hubiera en un combate.
A pesar de no haber recibido el Jefe los libros, que le son necesarios para organizar la mayoría se encuentran cuadernos apropiados en que aparece el buen arreglo de su documentación todo conforme á las prescriciones de la ordenanza. La cuenta y documentos de caja, manifiestan la pureza y honorabilidad de los que la manejan.

Antes de concluir llamaré la atención de U.S. manifestándole que las citadas Baterías han hecho tres pedidos de cal, cimiento romano, pintura y otros artículos que son de imperiosa necesidad para la terminación de las obras. U.S. se servirá hacerlo así presente al Bto. S.C.A.C. Gral.

Seame permitido esponer a U.S. que con motivo de haberseme ordenado con precisión marchar al Morro de Sama para desempeñar una nueva comisión no pasé á U.S. oportunamente el presente parte, llevando un retardo que me ha sido imposible evitar.

Dios guie a U.S.
Firma: Godines.


El 09 de enero de 1880 Panizo es nombrado Comandante General de Artillería de Campaña:

“Sr. Coronel D.[4]
Arnaldo Panizo
S.C.

S.Sr. el Bnmto Sor. Contralmirante, Jefe Superior de los Departamentos del Sur, que conoce los méritos de Us. Ha tenido a bien nombrarlo Comandante General de Artillería de Campaña.
Comunícolo a Us. Felicitándolo por la prueba de distinción que merece sus aptitudes y patriotismo. Dios Guíe a Us.
José de la Torre.”

Publico a continuación los partes de los combates de costa correspondientes a la Comandancia General de Artillería de Campaña, cuyos borradores están incluidos en la serie de documentos del Archivo Panizo. Estos partes están apoyados por el parte del Jefe del Estado Mayor General del Ejército del Sur, el coronel José de la Torre. En ellos se revela un nuevo aspecto referente a la actuación victoriosa de la artillería de costa ante la amenaza chilena. Las cartas hablan por sí solas y describen diversas situaciones poco conocidas y que afianzan la sentencia que las fortificaciones de Arica fueron inexpugnables por mar.


1er. Combate de Costa: Narración documental.-


Comandancia General de
Artillería de Campaña

Arica, febrero 27 de 1880.

Sor. Coronel Jefe de E.M.G.

S.C.

A las 8am del día de hoy, me constituí como de costumbre, en los trabajos de fortificación de campaña que están bajo mi dirección y estando allí me llamó la atención la proximidad del “Huascar” á las baterías del “Morro” y desde ese momento creí inevitable un combate, el que no se dejó esperar; pues á las 9am rompió sus fuegos dicha batería.
Inmediatamente pasé a las baterías del Norte acompañado del Sargento Mayor D. Pedro Ugarteche, del injeniero señor Teobaldo Eléspuru, del secretario de esta Comandancia Sarjento Mayor Grdo. D. Ernesto Diez Canseco y del ayudante subteniente Don Gerardo Soria; donde encontrando a Us me ordenó tomara el mando de dichas baterías.

Constituíme en la de “Santa Rosa” que fue la primera en hacer fuego, á las órdenes del Mayor Ugarteche y servida por la 1ra. Compañía de la Brigada del Norte y la 3ra. de la Brigada de Campaña mandadas por el Sarjento Mayor Grdo. D: Nicanor García Goytizolo; siguiendo inmediatamente la de “San José” servida por la 4ta. Compañía de la Brigada “Artillería de Campaña” mandada por el Capitán Grdo. Eloy Caballero y a las ordenes del 2do. Jefe de este cuerpo, Sarjento Mayor Don Manuel Martinez; y la del “2 de Mayo” servida por la 2da. y 3ra. Compañías de la Brigada del Norte, á las ordenes del Comandante de las baterías Teniente Coronel Don Juan Pablo Ayllón.

El combate continuó contra el “Huascar” y la corbeta “Magallanes” que se le unió poco después hasta las 10h 30am dando comienzo de nuevo a las 11 y terminando a las 4pm, por haberse puesto el enemigo fuera de tiro, huyendo del monitor “Manco Capac” y de los fuegos del “Morro” y Baterías del Norte, haciendo los últimos disparos la de “San José”.

Los proyectiles arrojados por estas baterías ascienden á cuarenta: trece huecos y veinte y siete sólidos; siendo satisfactorio anunciar á Us. no haber ocurrido novedad durante el combate.
El Bnmto. Sor Contra almirante y Us., testigos oculares habrán quedado complacidos del entusiasmo y valor de los que combatieron bajo mis ordenes en las baterías del Norte.
Lo que tengo el honor de poner en conocimiento de US: para los fines que estime conveniente,

Dios Guie a US
S.C.

(sf) Arnaldo Panizo.


2do. Combate de Costa: Narración documental.-


Comandancia General de
Artillería de Campaña

Arica, Marzo 17 de 1880.

Sor. Coronel Jefe de E.M.G.
Del 1er. Ejército del Sur.

S.C.

A las 5 horas del día de hoy, entró en este puerto nuestra corbeta de guerra “Unión”. A las 6 recibí orden de Us. De poner las Baterías del Norte en son de combate.
Trascurrió la mañana son novedad, hasta las 9 a.m. que en que “Huascar” hizo algunos disparos sobre la “Unión” que fueron contestados por ella inmediatamente; pero el “Huascar” se había colocado á tal distancia que hubiera sido inútil que las baterías de mi mando le hubieran hecho fuego; pues estaba fuera de tiro: á las 10 poco mas ó menos se retiró para regresar á la 1 p.m. é hizo de nuevo fuego contra nuestra corbeta que fue contestado por ella y por las Baterías del “Morro”.

Después de dos ó tres tiros del “Huascar” hechos fuera de nuestro alcance, pasó este monitor hacia el sur; al mismo tiempo el blindado “Cochrane” navegó rumbo á estas baterías para cruzar sus fuegos con los del “Huascar” sobre la “Unión” y habiéndose puesto a tiro, ordené romper inmediatamente los fuegos, lo que se hizo en el acto; logrando que el blindado chileno abandonara ese punto, navegando hacia el sur hasta ponerse fuera de nuestro alcance.

Poco después el “Huascar” que había estado tras la Isla sin hacer fuego, atravezó la bahía, seguida de uno de sus trasportes que se encontraba al Norte; en su travesía le hicimos fuego hasta que puesto fuera de nuestro alcance, mandé que cesaran estos.

El combate continuó hasta las 2h 45’ p.m; hora en que el blindado chileno hizo rumbo al Norte yendo a unirse con el “Huascar” y el trasporte, haciendo los últimos disparos nuestra bien mandada y tripulada corbeta, que impasible y serena recibía momento por momento los bien dirigidos disparos del enemigo, contestándolos con valeroso entusiasmo.

Los proyectiles arrojados por estas baterías, ascienden á veinte y dos: diez huecos y doce sólidos, siéndome satisfactorio anunciar a Us. No haber ocurrido novedad durante el combate.

Los jefes, oficiales é individuos de tropa que combatieron á mis órdenes, manifestaron como siempre su entusiasmo y valor.
El Cirujano en Jefe Don Pedro Bertonelli, que se presentó en la Batería de “Santa Rosa” expontaneamente, la Ambulancia N2. y la sección respectiva de la Maestranza, estuvieron en sus puestos para acudir con sus servicios donde lo exigieran las circunstancias, lo que felizmente no fue necesario emplear.

Es todo lo que tengo el honor de poner en conocimiento de Us. Para los fines que estime conveniente.
Dios Guie a Us.

(sf) Arnaldo Panizo.


Comandancia General de Artillería en Campaña.
Relación de los S.S. jefes y oficiales de la expresada, que han combatido en las Baterías del Norte contra la Escuadra Chilena.



Día 27 de Febrero de 1880

Coronel Don Arnaldo Panizo Comandante General
Srgto. Mor. “ Ernesto Diez Canseco Secretario
Subteniente “ M. Gerardo Soria Ayudante
Id. “ Pedro Carlín Amanuense
Sor Don Teobaldo Eléspuru Ingeniero

Día 17 de Marzo de 1880

Coronel Don Arnaldo Panizo Comandante General
Srgto. Mor. “ Ernesto Diez Canseco Secretario
Subteniente “ M. Gerardo Soria Ayudante
Sor Don Teobaldo Eléspuru Ingeniero
“ “ Pedro Bertonelli Cirujano Mayor del E.

Arica, Marzo 20 de 1880
Firma: Ernesto Diez Canseco
Vo.Bo. (Firmado) Panizo.


Parte del Estado Mayor General del 1er. Ejército del Sur.-

(Copia)[5]
Estado Mayor General del
1er. Ejército del Sur

Arica, Marzo 18 de 1880.

Bnmto Sr. Contra Almirante
General en Jefe del 1er. Ejército del Sur

B.S.C.A

Tan luego que se me dio parte en el campamento de que la corbeta “Unión” había fondeado en el puerto, en la mañana de ayer, me constituí inmediatamente a bordo á fin de disponer lo conveniente, para el desembarco de lo que conducía, y atender á la vez, á la provisión de lo que necesitaba. En efecto, así lo verifiqué y habiéndose apercibido a poco rato, que el monitor “Huascar” se dirigía a la rada, ordené al Comandante del monitor “Manco Capac”, que se encontraba en la corbeta, que saliera una y media milla afuera, con el buque de su mando, para cubrir con sus fuegos a la “Unión”; disponiendo á la vez, que el Coronel D. Arnaldo Panizo, que me acompañaba en esos instantes, se constituyera en su puesto como Jefe que era de las Baterías del Norte, con el objeto de atender a la parte que le concernía, en el combate próximo a librarse. En seguida me dirigí a tierra, llegando de transito al monitor “Manco Capac”, á reiterar la órden de salida, de que he hecho referencia, y ordenando á la lancha torpedera “Alianza”, que aprovechase de una ocasión favorable, para aplicar un torpedo, á cualquiera de los buques enemigos.

Una vez en tierra, dispuse que se continuara proveyendo de carbón á la corbeta, en la cantidad que le era necesaria, y dirigiéndose después á las Baterías, adonde dicté las disposiciones del caso para el combate. Este no se hizo esperar, pues avanzando el “Huascar” rompió sus fuegos haciendo 8 tiros sobre nuestra corbeta y monitor, desde las 8.50am, hasta las 9.30am, siendo contestados por dos tiros del “Morro” y dos de la “Unión” y retirándose á la ultima hora preindicada, al lado de los demás buques, el agresor.

A las doce m. se renovó el combate, el cual se hizo general desde ese momento, siendo de notar que dirigiéndose el “Cochrane” á atacar de un modo decisivo a la “Unión”, tuvo que desistir de su empeño, por dos tiros certeros de á trescientos que le dirigió las Baterías del Norte, y por el nutrido fuego que se le hacía de todos nuestros fuertes, marchando á todo su andar á colocarse al frente del “Morro”, de donde también fue rechazado, haciendo apagar el fuego del enemigo á las 2.20pm, hora en que se retiró con los demás buques, situándose fuera de tiro.

Es muy importante y difícil de apreciar la circunstancia de que a pesar de ser atacada con insistencia la corbeta “Unión”, por el blindado “Cochrane” y el “Huascar”, y teniendo los enemigos á mas de un blanco fijo, ocho cañones de a 300, y otros de menor calibre, que hacían fuego incesante sóbre la corbeta, que contestaba con rapidez y energía á los fuegos, no haya sufrido más daño que la muerte de un individuo y ocho heridos, por dos proyectiles caídos en la caja de humo, y en la parte de próa; manifestando a Us. que dos de esos individuos pertenecía al número de los del ejército, que verificaban el cargamento del carbón para el buque, durante el primitivo ataque del “Huascar”, en las frecuentes véces que cruzo por toda la extensión de la bahía, sin que los perturbara el estampido del cañón, y continuando impasible en la ocupación que se les había dado.

Concluido el combate, me constituí á las 4 horas 30 minutos pm. en la corbeta “Unión”, y ordené á su Comandante que zarpara en el acto, aprovechando, de la oportunidad de haberse reconcentrado hacia el Oeste los buques enemigos, pues en la noche creí imposible su evasión, y si prolongaba su permanencia hasta el día siguiente, era inevitable la pérdida del buque, porque el transporte chileno “Cousiño” había marchado en la mañana del día de su llegada, con rumbo al Norte, sin duda con el fin de traer el resto de la escuadra chilena que se hallaba en Pacocha.
Efectivamente, á las 5 y 15’p.m., levó anclas la corbeta, y se hizo a la mar con rumbo sur, entre los hurras de los valerosos combatientes, que la habían defendido con abnegación y entusiasmo; siendo perseguido después de un momento por el transporte “Amazonas”, blindado “Cochrane” y monitor “Huascar”, los mismos que se avistaron en el puerto en la mañana de hoy, en unión del blindado “Blanco Encalada” y trasporte “Angamos”, todo lo cual pone en evidencia el haberse salvado nuestro buque.

No concluiré sin encomiar la decisión y entusiasmo general de los combatientes; permitiéndome recomendar particularmente á Us., al Comandante General de las Baterías de esta Plaza, Capitán de Navío D. Camilo N. Carrillo, al Coronel D. Arnaldo Panizo y al Capitán de Fragata comandante del monitor “Manco Capac” D. José Sanchez Lagomarsino, á quienes se les debe el que no se haya perdido la corbeta, que hubiera sido destruida por la artillería enemiga, haciendo imposible, por consiguiente su salvación, al no mediar los esfuerzos desplegados en su defensa, por los jefes que hago mención; recomendando también á Us. la solicita actividad del Capitán del Puerto, Capitán de Fragata D. Eduardo Raygada, que en la esfera que le competía cumplió con sus deberes, haciendo rápido á la vez, el embarco de carbón con que se proveía a la corbeta; y al Sub Jefe de este Estado Mayor General, Coronel D. Jacinto Mendoza, y Teniente Coronel D. Ramón A. Zavala que estuvieron siempre á mi lado durante el combate.

Testigo presencial de los hechos relatados los valorizo en toda su importancia y magnitud haciéndose acreedores á justos y merecidos elogios, el digno y valeroso comandante de la corbeta “Unión”, Capitán de Navío graduado Don Manuel Villavicencio, y su heróica oficialidad, que serenos ante el inminente peligro en que se encontraban, lograron salvarla, ejecutando una gloriosa salida al frente de dos poderosos buques, y un trasporte enemigos, que se halaban concretados a impedir su marcha.

Elevo al despacho de Us. los partes orijinales que sobre tan heróico combate, me han dirigido los comandantes Grales. De las Baterías de esta Plaza, de la Artillería en Campaña Jefe Accidental de la Batería del Norte, del Monitor “Manco Capac”, y de la lancha torpedera “Alianza” incluyendo á la vez las listas de presentes en las Baterías, los de los Jefes y Oficiales de este E.M.Gral que concurrieron á ellos, y la correspondiente á los que se encontraban en el monitor “Manco Capac”.

Dios guie a Us.
B.S.C.A
(Firmado) José de la Torre

Relación de los Sres. Jefes y Oficiales del Estado Mayor General del 1er. Ejército del Sur, que se encontraron en las Baterías del Morro, durante el combate del 17 del presente.

Grados Clases Nombres Destinos
Coronel Tnte. Coronel D. Jacinto Mendoza Sub J. de E.M.Gral
Coronel “ “ José Godines
Coronel “ “ Benigno Ostolaza
“ “ Manuel Santos la Torre
Sgto.Mor Capitán “ Julian Arce
“ “ “ José Matías Salazar
“ “ “ Fernando de la Fuente
“ “ Julian Rojas
“ “ Juan C. Rivero
Teniente “ Cosme Cobos
Teniente “ Manuel Fco. De los Rios
Teniente Coronel “ Ramón Zavala Ayudantes en Jefe de E.M.G.
Capitán Teniente “ Enrique de la Torre “

Arica, Marzo 18 de 1880.
(Firmado) Jacinto Mendoza

Vo.Bo. (Firmado) La Torre.


Después de haber leído la documentación referente a las dos victorias peruanas en Arica, producto de un buen planeamiento y la eficiencia del jefe de las fortificaciones, el Contralmirante Lizardo Montero envía un telegrama al coronel Panizo:


(Oficina Telegrafo Arica)[6]
Telegrama de Tacna
Marzo 19 de 1880.

Sr. Coronel Panizo
Arica

El amigo y el Jefe te felicitan por los bellos resultados que han dado tus incesantes trabajos de las Baterías.

Firma: Montero

Rdo. 3h 45pm

Para terminar es de resaltar como mencioné en la introducción, que este trabajo pretende resaltar el rol de la Artillería en la construcción y posterior “prueba de fuego” en los dos combates de costa, ejercicio que tuvo una nota satisfactoria pero el real éxito viene de un trabajo conjunto con las demás fuerzas del ejército y marina, lo que nos lleva a la conclusión que la única forma de lograr victorias es la permanente conjunción de fuerzas, punto que se fue perdiendo durante la pasada guerra debido a constantes preferencias partidaristas y caudillistas que es materia de un profundo estudio sociológico.

Finalizo este trabajo publicando el artículo 2do. de la Orden General del 1er. Ejército del Sur, el día 21 de Marzo de 1880, poco conocido en nuestro medio y que obra en copia manuscrita en los archivos del SEHCAP.

Art. 2do.- El Bmto Sor. Contra Almirante Gal en Jefe del Ejército del Sur, con fecha 19 del corriente dice lo que sigue:
La función de armas que ha tenido lugar el día 17 con motivo de la entrada y salida al puerto de Arica de la Corbeta de Guerra “Unión”, constituye una gloria nacional, cuya conquista se debe a la audacia y habilidad del comandante D. Manuel A. Villavicencio y a los bravos defensores de esta plaza militar.
Si el 27 de Febrero se probó por primera vez al enemigo de cuanto eran capaces los hombres á cuyo valor y civismo se ha confiado la defensa del codiciado Arica, diez días después (sic), es decir el 17 del corriente, ha presentadose la brillante ocasión de hacer conocer al mundo hasta donde puede llevarse el denuedo y la pericia cuando se obedece á los nobles estimulos de un ascendrado patriotismo.

El Comdte. Villavicencio y sus dignos compañeros pues han escrito un preciosa pagina en nuestras historia, acreditando una serenidad á toda prueba y los mas profundos conocimientos profesionales: á todos los felicito pues, con patriótico entusiasmo!.

Por lo demás, la patria sabrá premiar debidamente á sus valientes hijos, que en jornadas desiguales han aumentado su gloria y su renombre. Mientras tanto, reciba el Comdte. Villavicencio así como los jefes superiores de la plaza, los comandantes de las Baterías y del Monitor “Manco Capac” y los demás servidores de la nación que tanto se han distinguido, el testimonio de mi júbilo y admiración, haciendolo tan público como lo permitan los límites de la orden general del Ejército de mi mando, en cuyas páginas se consignará la presente comunicación = Montero.

Firma: El Jefe de E. M. José LaTorre






(*) Director de la Sociedad de Estudios Históricos Coronel Arnaldo Panizo (SEHCAP)
[1] La Batalla de Arica. Gerardo Vargas Hurtado. Pág. 14. 1ra. Edición 1921
[2] Libreta de Servicios del coronel Arnaldo Panizo. Archivo Panizo. Sociedad de Estudios Históricos Coronel Arnaldo Panizo (SEHCAP) sehcap@sehcap.org
[3] Colección de la Srta. Elsa Panizo Martínez, nieta del coronel Arnaldo Panizo. Gentilmente donó una copia notariada al SEHCAP.
[4] Archivo Panizo. Folder No.4 Sociedad de Estudios Históricos Coronel Arnaldo Panizo (SEHCAP). sehcap@sehcap.org
[5] Documento de la colección de la Srta. Elsa Panizo Martínez, nieta del Coronel Arnaldo Panizo. El SEHCAP posee una copia notariada.
[6] Archivo Panizo. Folder No.4. Sociedad de Estudios Históricos Coronel Arnaldo Panizo (SEHCAP)

sábado, 16 de mayo de 2009

Hallazgo del Cañón "Dahlgren" de Miraflores

Por: Juan Carlos Flórez Granda(*)


A principios del mes de mayo del 2009, mientras se realizaban las obras de excavación para la construcción de un edificio en la cuadra 4 de la avenida Shell en Miraflores, obreros de construcción encontraron una gran pieza de metal que por sus características se podía determinar a primera vista que era un cañón de grueso calibre. Algunos medios de prensa informaron sobre este hallazgo. El INC tomó cartas en el asunto y determinó su traslado provisional, en coordinación con las autoridades de la Municipalidad de Miraflores, al parque Reducto No.2
Según se desprende de lo informado periodísticamente, se afirmaba que este cañón era anterior a la pasada guerra con Chile, escenario donde se desarrollo la batalla de Miraflores el 15 de enero de 1881.

Se sabe por documentación de la época y partes oficiales que la línea de Miraflores estaba apoyada en su derecha por la Batería de costa denominada “Alfonso Ugarte”, compuesta por dos cañones “Rodman” de 125 libras y dos “Parrot” de 100 libras. Los modelos de cañones no correspondían al tipo de cañón encontrado pero se sabía también que, entre los Reductos Nros. 1 y 2, tras sus líneas se colocó un cañón de grueso calibre a la entrada del pueblo de Miraflores.

Esta pieza era un “Dahlgren” de 175 libras y tuvo una participación activa durante la batalla del 15 de enero. A la pérdida de la batalla el ejército chileno tomó este cañón y lo registró fotográficamente antes de volarlo, tal como hicieron con otros cañones.

Rudolf Le Lisle fue un teniente de la Marina Inglesa que vino al Perú durante la guerra en diciembre de 1879, permaneciendo toda la campaña hasta poco después de la ocupación de Lima. En su estadía y tiempo libre logró estampar, algunas con cruda realidad y otras con arte, distintas secuencias de las batallas realizadas. Entre estas, registró en acuarela el cañón “Dahlgren”, ya volado por los chilenos a la entrada de Miraflores.

El cañón Dahlgren, invento del marino estadounidense John Dahlgren estaba forjado en hierro fundido. Para su elaboración se utilizaba un molde interior enfriado con agua bajo el sistema creado por el capitán Thomas J. Rodman, de esta forma la superficie interior del ánima se solidificaba rápidamente mientras el resto de la masa exterior lo hacía lentamente logrando por compresión, un metal de alta calidad resistente a altas temperaturas y presión a la hora de disparar.
El diámetro del ánima era de 11 pulgadas y su correspondencia era una bala lisa de 175 libras. La forma exterior ovalada era característica en estos cañones y haciendo las mediciones del caso en el cañón encontrado en la excavación, sumado a fotografías y acuarelas de la época, se logra establecer con exactitud que ese cañón fue el Dahlgren que estuvo ubicado en las puertas de Miraflores durante su defensa.

Conversé con el residente de obra sobre los pormenores del hallazgo y me indicó que este se encontró a unos 4 metros de profundidad y bajo un contexto disturbado, es decir que alrededor había basura, tierra removida y escombros de una anterior construcción. Esto nos hace suponer que este cañón de casi 8 toneladas (16,000 libras) alguna vez ha sido desenterrado y vuelto a enterrar dentro de un radio de 50 metros muy cercano a su posición original, ya que los registros históricos nos indican una posición muy cercana a este.
Para los interesados en ubicar el punto exacto del cañón lo pueden marcar bajo las siguientes coordenadas: 12º 07’ 24.9” S - 077º 01’ 39.2” W

Es de resaltar la importancia de este cañón y su rescate y puesta en valor ya que es uno de los pocos vestigios de la heroica defensa que hizo la población de Miraflores.
Completamente identificado, como se ha demostrado, este cañón debería ser restaurado en su totalidad y exhibido en una plaza pública central del distrito de Miraflores como símbolo histórico de resistencia de todos los peruanos que dieron, unos sus vidas y otros su ejemplo, para defender nuestro territorio frente a cualquier amenaza externa y sobre todo para no olvidar a esos grandes peruanos de la batalla del 15 de enero de 1881.


(*) Publicista e Investigador de la Guerra del Pacífico
Director de la Sociedad de Estudios Históricos Coronel Arnaldo Panizo

jueves, 14 de mayo de 2009

Colegio de Historiadores: Un atentado contra los libres pensadores en Historia.

Quien escribe no es historiador profesional. Fuera de mi actividad principal, me dedico a la investigación histórica desde hace más de 12 años, sobre todo lo que concierne a la guerra de 1879.
En todo ese tiempo he aportado mis conocimientos publicando libros, artículos en revistas, dictando por invitación charlas en institutos históricos, universidades y escribiendo en medios impresos de comunicación. Me considero un investigador autodidacta y la pasión que tengo por la historia me ha llevado a solventar investigaciones con recursos propios y leer muchos libros para aprender técnicas de estudio y conservación no solo en la teoría sino también en el campo. He recorrido varios archivos públicos y privados digitalizando documentación valiosa y completa por lo que hoy cuento con un banco de datos lo suficientemente amplio e inédito para mis investigaciones sobre la guerra de 1879.

Con la supuesta aprobación de este proyecto, todos los investigadores autodidactas que no somos historiadores pasaríamos a la categoría de delincuentes, sin libertad ni derecho de opinar en la materia, ya que uno de los puntos de sustentación del proyecto dice a la letra: "...persiga y corrija con contundencia, dentro del marco legal, el intrusismo profesional y la autonominación como historiadores que se hacen personas que no lo son..."
¡Qué gran atentado a la libertad de expresión!.

Los grandes historiadores de la humanidad nunca fueron historiadores con título sino simples, observadores, investigadores, libres pensadores y escritores de sus hechos. En el caso peruano contamos con numerosas personas que nunca tuvieron un título de historiador pero que han dejado para la posteridad valiosos estudios de nuestro pasado.
El título de historiador no es garantía de la capacidad ni sapiencia de una persona; son los estudios, investigaciones y trabajos posteriores que dan al profesional titulado la experiencia y reconocimiento necesarios, producto de su esfuerzo y capacidad. De ellos también existe una larga lista de prestigiosos profesionales.

La profesionalización de la historia es muy importante porque proporciona valiosas herramientas que conducen a un esquema científico de investigación. De eso no existe duda.

Crear un Colegio de Historiadores con el fin de establecer que solamente los historiadores titulados y colegiados son los autorizados en publicar libros y opinar sobre historia, según se desprende en la sustentación del Proyecto de Ley No. 904/2006-CR, el cual tengo a la mano, y sancionar de acuerdo a Ley a cualquiera que emita alguna opinión, publicación y no sea un profesional de la historia es tan disparatado como crear un Colegio de Artistas donde solo los artistas titulados puedan elaborar algún material artístico y sancionar de acuerdo a Ley a cualquier persona que se atreva a pintar, exponer, elaborar cualquier pieza artística.

¿Qué hay de los cientos de autodidactas que nos dedicamos a aportar conocimientos, experiecia y trabajamos conjuntamente con historiadores profesionales para lograr un mejor compresión de nuestro pasado?.
El día de mañana cerrarán el acceso de todos los archivos a los investigadores, periodistas, genealogistas, etc., bajo el pretexto de no ser historiador titulado y colegiado. Habría que analizar qué clase de historiadores están detrás de este proyecto porque al parecer el problema central son los celos profesionales y la falta de oportunidades de trabajo ante la creciente ola de investigadores que ofrecen publicaciones de temas históricos con justo fundamento.
El historiador promedio se gana un sitial y prestigio con un estudio detallado del tema y ellos son la mayoría, los mismos que rechazan la creación de este Colegio por tener serias irregularidades de fondo. La colegiatura es buena pero que esta no afecte la libre expresión y acceso a la información y conocimiento.
La diferencia entre un investigador y un historiador es que el primero se circunscribe a temas específicos que le interesan, en mi caso el siglo XIX y la guerra con Chile. El segundo tiene una formación académica universitaria global y por ende las herramientas y visión necesarias para comprender un contexto específico o general de cualquier periodo histórico. Me es necesario muchas veces contar con la consulta de un historiador para centrar los objetivos a plantear y a la vez el historiador se enriquece con la minuciosidad y experiencia de lo investigado.

Cerrar las puertas al libre conocimiento y circunscribirlo exclusivamente a historiadores titulados, atenta contra la libertad de derecho que tenemos todos los peruanos para acceder a la información y más cuando se trata del estudio de nuestro pasado.

Se nota claramente la intervención y sesgo de la Asociación de Historiadores de la Región Sur para beneficio propio (más miembros de ese gremio) y por lo que he estado leyendo y consultando con otros historiadores no tiene gran representatividad nacional. Espero que este proyecto no se apruebe por contener irregularidades constitucionales y vuelva a ser revisado por completo por un grupo democrático de historiadores con representatividad en el medio nacional.
Si se pretende crear un Colegio de Historiadores, que este no atente con las libertades básicas de información y expresión en la que los mismos periodistas de investigación no tendrían derecho a acceder ni publicar nada relacionado al pasado histórico de nuestro país.

Rechazo plenamente un proyecto de Ley que afecta a todos los peruanos comunes, aficionados, egresados y profesionales que se interesan en la investigación histórica.
Atentamente,


Juan Carlos Flórez Granda.
Publicista e investigador de la Guerra del Pacífico
Director de la Sociedad de Estudios Históricos
Coronel Arnaldo Panizo (SEHCAP)